Moradillo de Sedano

Patrimonio Románico y Naturaleza Única

A tan solo 50km de la capital burgalesa siguiendo la carretera BU-514 que se comunica con la N-623 (Burgos – Santander), encontramos Moradillo de Sedano. Un pequeño pueblo en el que actualmente viven tan solo 15 personas.

Geoparque de las Loras

Rodeado por el impresionante entorno natural de las Hoces del Alto Ebro y Rudrón, este pueblo forma parte del Geoparque Mundial de las Loras, protegido por la UNESCO.

Además, Moradillo es un punto destacado en la ruta primitiva de peregrinación a Santiago de Compostela.

Un viaje en el tiempo: del románico a la prehistoria

El Valle de Sedano es un destino que combina patrimonio, historia y paisajes inolvidables. Su joya más preciada es la Iglesia de San Esteban en Moradillo de Sedano, un impresionante ejemplo del románico castellano. Declarada Monumento Histórico-Artístico, esta iglesia fascina a quienes la visitan con su arquitectura singular y su exquisita ornamentación.

Pero Moradillo de Sedano no solo guarda tesoros medievales. Aquí también encontrarás el dolmen de Las Arnillas, un monumento funerario de más de 2.600 años de antigüedad. Este increíble vestigio arqueológico contiene una cámara sepulcral donde se han hallado restos humanos y un ajuar compuesto por herramientas de piedra, adornos de conchas marinas y cuentas de ámbar. Un auténtico vistazo a la vida de nuestros antepasados prehistóricos.

Un tesoro del románico en el Valle de Sedano

Este icono de Moradillo de Sedano es una joya del románico burgalés y una parada imprescindible en una de las rutas primitivas hacia Santiago de Compostela.

Construida en 1188 y declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional en 1931, esta iglesia ha sabido adaptarse al paso del tiempo. Sus muros han vivido reformas góticas, restauraciones tras un incendio en los siglos XVII y XVIII, y aún conserva la esencia que la convierte en un Bien de Interés Cultural.

Iglesia románica de San Esteban

La Iglesia de San Esteban destaca por su imponente arquitectura y detalles únicos. Su pórtico, decorado con relieves magistrales, combina escenas bíblicas como el Pantocrátor y el sacrificio de Isaac con figuras de animales reales y fantásticos. Una experiencia visual que te transportará a otra época.

En su interior, la nave principal abovedada se divide en tres tramos, acompañada por un ábside y un crucero que, aunque reconstruidos en el siglo XVII, mantienen el espíritu de la obra original. No te pierdas el muro meridional y las columnas interiores, un testimonio de la influencia Silense y del arte románico regional.