De Escalada a Orbaneja del Castillo
Un Viaje Entre Naturaleza y Tradición
Adéntrate en un recorrido fascinante por el Cañón del Ebro, donde la historia y la naturaleza se entrelazan en antiguos caminos utilizados por los pobladores de la zona. Esta ruta te permitirá caminar junto al río, explorar frondosos bosques de ribera y ascender hasta las impresionantes parameras de La Lora, desde donde disfrutarás de unas vistas espectaculares.
Inicio en Escalada
Siguiendo el Curso del Ebro
La ruta comienza en Escalada, tomando la calle principal que desciende hasta el río Ebro. Después de cruzarlo por un estrecho puente, el camino se dirige hacia la derecha, avanzando junto a la corriente del agua.
Aquí, la naturaleza se despliega en todo su esplendor: un bosque de ribera bien conservado te envuelve con la presencia de alisos, álamos negros, sauces, avellanos y quejigos, ofreciendo refugio a una abundante fauna. Con suerte, podrás avistar nutrias y aves acuáticas como la garza real, que frecuenta estos parajes.
Siguiendo el trazado serpenteante del río, llegarás a la altura de Orbaneja del Castillo, un pintoresco pueblo que bien merece una visita.
Ascenso al Páramo
Historia y Naturaleza en Estado Puro
Sin necesidad de cruzar el puente que lleva al pueblo, la ruta continúa ascendiendo por la corriente del río. En un cruce, tomarás el sendero de la izquierda, dejando atrás el bosque de ribera para adentrarte en zonas más elevadas. A medida que asciendes, atraviesas bosques de hayas, supervivientes de un tiempo en el que estas umbrías estaban cubiertas por vegetación más densa y húmeda.
La Pata del Cid
Panorámicas del Cañón del Ebro
El ascenso te llevará hasta un imponente escalón de piedra que domina el Cañón del Ebro. Este mirador natural es el lugar perfecto para observar el vuelo majestuoso de buitres leonados, alimoches y águilas reales, e incluso la esquiva águila perdicera, que tiene aquí su hogar.
A partir de aquí, la ruta atraviesa antiguas zonas de carbón vegetal y bordea campos de cultivo antes de transformarse en un camino más definido. Al alcanzar la meseta de La Lora, el paisaje se torna árido y desolado, una imagen que da nombre a este paraje también conocido como La Pata del Cid.
Regreso a Escalada
Descendiendo con vistas únicas
En la bifurcación, deberás dejar el camino de la derecha y tomar el sendero de la izquierda, que poco a poco te llevará de nuevo hacia el borde del Cañón del Ebro. Desde aquí, el descenso se realiza en amplios zigzags entre una densa vegetación, con vistas panorámicas del cañón que te acompañarán hasta alcanzar el camino principal junto al río Ebro. Solo queda tomar el sendero hacia la derecha y regresar al punto de inicio en Escalada.