Ruta de los Chozos

Paisajes y Tradiciones en Orbaneja del Castillo

Imagina caminar por un paisaje que ha sido testigo de siglos de historia. La ruta que comienza en Orbaneja del Castillo no es solo un paseo, es un viaje al pasado que conecta al visitante con las tradiciones más profundas de la región. Desde la calle, por encima de la iglesia, seguimos el sendero hacia el humilladero, donde el camino se bifurca. ¿A cuál de las dos opciones nos llevará nuestra curiosidad?

La Ruta

Si elegimos continuar de frente, alcanzaremos uno de los balcones naturales más espectaculares de la comarca. La panorámica que se abre ante nuestros ojos, con el río serpenteando y el pueblo de Orbaneja del Castillo descansando a sus pies, es un regalo para los sentidos.

Sin embargo, si nos aventuramos a la izquierda, el sendero también ofrece vistas impresionantes que no dejan de sorprender.

Los Chozos

Ambos caminos nos conducen a los chozos, unos refugios construidos con piedra en seco, con cúpulas formadas por hiladas de piedra dispuestas con precisión. Estos chozos, que fueron esenciales en el duro trabajo agrícola de los habitantes de Orbaneja hasta la década de 1960, forman un conjunto arquitectónico único. Los agricultores, que cultivaban los páramos de la Lora de Sargentes, usaban estos chozos como refugio para protegerse del calor abrasador del verano mientras trillaban el grano.

Recorriendo esta ruta, podemos imaginar el esfuerzo que se realizaba en tiempos pasados: el transporte de las gavillas por senderos escarpados, las idas y venidas a lomos de burro, y el trabajo incesante que definió la vida de muchos en Orbaneja. Aún hoy, los chozos siguen de pie, como testigos silentes de esas épocas de lucha y supervivencia.

Al bajar por el otro camino, comprenderemos mejor la vida de los agricultores, con la vista puesta en los campos y el horizonte. La ruta no es solo una experiencia visual, sino una forma de conectar con una tradición que sigue viva en cada piedra, en cada rincón del paisaje. Ven a vivir la historia del Valle de Sedano y siente la naturaleza en su estado más puro.

Croquis "siempredepaso.es"